Su nombre es Kim Ji-young. Tiene 33 años y el nombre más común de Corea. Su historia ha incendiado Asia entera.
«Ni siquiera yo sé si me casaré o si tendré hijos. O puede que me muera antes. ¿Por qué tengo que renunciar a lo que quiero ser o hacer por un futuro que no sé si llegará o no?»
Esta novela ha pasado de ser la breve historia de una joven coreana a convertirse en un terremoto que ha sacudido a las mujeres de medio mundo. Kim Ji-young (que lleva el nombre más común entre las mujeres coreanas nacidas en 1982) es aparentemente una mujer como cualquier otra, con una juventud sin pena ni gloria, siempre a la sombra. Todo se retuerce cuando, de repente, Kim empieza a hablar con las voces de su madre, de una amiga desaparecida, de otras muchas mujeres. Lo que parecía una broma adquiere el tono de una respuesta, de una insurrección y, para los demás, el tono de una enfermedad.
Este libro ha sido una embestida para el panorama literario de todos los países en los que se ha publicado. Bajo su aparente sencillez, hay una sensación de peligro que palpita a lo largo de todas sus páginas y que ha abierto una grieta en los estándares de la literatura contemporánea.
OPINIÓN:
Esta es una de las historias que, si no fuera por recomendación, tal vez no me habría animado a leer. Por ello, tengo que dar las gracias a mi amiga Mimi por el regalo que me ha hecho, no solo al darme el libro, sino al permitirme conocer esta historia.
Aunque sea ficción, esta es una historia con la que muchas mujeres de Corea del Sur podrían sentirse perfectamente identificadas. Una historia dura de superación y de lucha y de lo mucho que nos queda por avanzar.
¿Qué vamos a encontrar en esta novela? Lo que comienza como una historia extraña y de ficción, acaba siendo la breve biografía de Kim Ji-young, una mujer de Corea del Sur que ha crecido en una sociedad machista y patriarcal en la que las mujeres intentan hacerse un hueco.
Es la historia de Ji-young, pero también de su hermana, de su madre, de sus compañeras. Es la historia de esas mujeres jóvenes que quieren ser independientes.
Vamos a ver cómo los hombres disfrutan de unos privilegios que a las mujeres se les siguen negando. Cómo Ji-young trata de hacerse un hueco en una empresa que prefiere contratar hombres; cómo la sociedad asume que las mujeres son parásitos que se aprovechan de sus maridos y se quejan por gusto; una historia que se hace dura de leer, aunque resulta amena.
En esta novela encontramos la lucha de muchas mujeres y los mínimos avances de una Corea que poco a poco empieza a dar ciertos derechos a las jóvenes que quieren ser independientes, libres y trabajadoras fuera del hogar.
Mensaje de la novela: En este caso no hay un mensaje, lo que hay es una realidad. Se nos muestra lo dura que es la vida en Corea del Sur, especialmente para las mujeres.
Personajes: Los personajes en esta obra son un claro reflejo de la sociedad surcoreana.
El hecho de que algunos personajes sean machistas o retrógrados no es una forma en que la autora transmite un mensaje, sino más bien lo que podríamos escuchar caminando por las calles de Seúl.
Kim Ji-young es el personaje mejor construido y al que mejor conocemos, ya que esta es su historia, pero también se ven muy bien construidos los demás personajes.
La madre y la hermana de Ji-young han sido mis personajes favorirtos, siendo mujeres fuertes, valientes e inteligentes.
Aunque sea la historia de Kim Ji-young, podría ser la historia de muchas, lo que da la sensación de que realmente estamos conociendo a una persona real. Es por ello que he podido empatizar con la protagonista, acompañarla en su historia, sufrir por ella y detestar una sociedad que no da voz a sus mujeres.
Los personajes están tan bien llevados, que más que una historia de ficción parece una crónica en un periódico o una biografía.
Lo que más me ha gustado: Lo sencillo que resulta leer la historia.
Cómo logra despertar sentimientos como la ira o la impotencia, pero también el cariño por algunos personajes.
El hecho de que es una historia que deja huella y que necesitas reposar un poco y meditar en ella. No hay que quedarse solo en que es una novela, sino pensar en que esto es la realidad de muchas personas.
El realismo que hay en las páginas.
Lo que menos me ha gustado: Esa parte de ficción del principio, en la que Kim J-young da voz a otras mujeres pero luego queda como cabo suelto. ¿Qué sucede con ello a parte de que vaya al psiquiatra? ¿Qué es lo que se intentaba transmitir con ello?